Estas son las mejores zonas de Puerto Real para la observación de aves. Podrás encontrar información sobre los senderos señalizados y noticias ornitológicas del Parque Natural de la Bahía de Cádiz.
Es un paraje natural de más de 25 hectáreas, lo que lo convierte en el pulmón verde de la Bahía de Cádiz. Es uno de los parques públicos más antiguos de Andalucía y único por su valor cultural y ambiental: es un bosque artificial creado en una zona desforestada, las canteras de piedras, que incluye poblaciones de fauna y flora amenazada.
En este bosque mediterráneo, podemos observar especies de aves como las lechuzas, abubillas, curruca, jilguero, verdones y búhos mientras disfrutamos de la naturaleza por sus senderos. En las inmediaciones del parque, hay un nido de cigüeñas blancas que podemos observar durante todo el año ya que son aves residentes.
Las marismas desecadas adyacentes a la Dehesa Pinar de las Yeguas sorprenden a los ornitólogos. Son excelentes para los alaúdidos, incluida la terrera marismeña. El aporte de agua dulce de un pequeño arroyo conforma un hábitat único en la bahía donde crían la lavandera boyera ibérica o la canastera común y es fácil observar el morito común y varias especies de ardeidas.
La Marisma de Cetina, con 800 hectáreas de salinas y 300 de reserva ambiental, es un proyecto que arrancó en 2014 y que persigue combinar los usos salineros del espacio con la recuperación del antiguo cauce, la mejora de las zonas encharcables de agua dulce y la generación de las condiciones óptimas para la reproducción y asentamiento de especies como el águila pescadora.
En el año 2017 se pusieron en libertad en la Dehesa de las Yeguas de más de una quincena de ejemplares de aves que han sido tratadas en el Centro de Recuperación de Aves de las Dunas de San Antón situado en el Puerto de Santa María.
Estos dos ecosistemas, pinar y salinas, están conectados por un sendero señalizado. Durante el trayecto podremos encontrarnos con aves como correlimos, chorlitejo, aguja, andarrío, archibebe, zarapito, avoceta, cigüeñuela, varias especies de gaviotas, garza, cigüeña, espátula, así como el flamenco.
Junto a la entrada del Parque Metropolitano Pinar de la Algaida – Los Toruños, podemos encontrar el sendero de la Laguna de la Vega y a las Lagunas Hipersalinas. La Laguna de la Vega es unas laguna estacional donde se pueden avistar espátulas, garcetas comunes o fochas comunes. Lagunas Hipersalinas permiten el anidamiento de cigüeñuelas, chorlitejos y charrancitos, garcetas, y es sitio de paso para las 4 o 5 parejas de cigüeñas negras que habitan en la bahía.
En el año 2018 han sido liberadas seis rapaces nocturnas, recuperadas en el CREA Dunas de San Antón, en concreto seis cárabos.
» Sendero Pinar de la Algaida ~ Salina de los Desamparados ».
Esta reserva natural situada en el municipio de Puerto Real está formada por tres lagunas, denominadas del Comisario, el Taraje, y San Antonio.
La importancia de esta reserva es principalmente debida a la avifauna, por ello ha sido declarada Zona de Especial Protección para las Aves, constituyendo una zona de nidificación e invernada. Algunas de las aves que se pueden encontrar en esta reserva natural son: garceta común, águila pescadora, aguilucho lagunero o cigüeña común entre otras.
La Laguna del Comisario es un humedal de carácter estacional que permanece sin agua los meses de verano. Las Lagunas de San Antonio y de Taraje mantienen el nivel de sus aguas más o menos constante a lo largo del año. Sólo la Laguna de Taraje es visitable tanto en bicicleta como a pie.
La Esperanza es la salina tradicional mejor conservada de la Bahía de Cádiz, en ella la Universidad de Cádiz lleva a cabo un proyecto de seguimiento científico de las aves. El mirador de la Salina La Esperanza se encuentra poco antes de la finalización del Sendero de Salina la Esperanza, y desde el mismo podemos contemplar las diferentes aves acuáticas que acuden a la zona para alimentarse y reproducirse como la garceta, avoceta, chorlitejo gris, gaviota reidora...
Algunas señales interpretativas a lo largo del sendero te permitirán identificar gran parte de estas especies que frecuentan este lugar atraídas por la riqueza de sus aguas poco profundas en las que encuentran alimento y refugio. Las patas y picos de muchas de las aves responden a un diseño eficaz que les permite andar y excavar por estos terrenos fangosos y filtrar el agua o capturar y triturar pequeños crustáceos que enriquecen su dieta.
La Isla del Trocadero se localiza a las puertas de la ciudad de Cádiz, con una superficie de 525 hectáreas. Fue declarado como Paraje Natural en el año 1989. Este espacio de marismas se enmarca dentro del Parque Natural Bahía de Cádiz y posee un alto valor ecológico y naturalista.
Las aves acuáticas tienen una especial relevancia en este espacio ya que estas marismas proporcionan un lugar perfecto como refugio, nidificación y fuente de alimentación. Concretamente este paraje es el sitio escogido, para anidar y criar, por aves especialmente delicadas, entre las que destacamos las espátulas, flamencos y garzas. Sus aguas también proporcionan el lugar perfecto para la cría y alevinaje de peces tan importantes para el sustento de la zona.
El área de dicho Parque Natural es uno de los ecosistemas de marismas mareales del arco suratlántico ibérico, constituye un hábitat de reposo y alimentación para numerosas aves acuáticas tanto en invernada como en sus rutas migratorias y reviste especial importancia como lugar de cría de algunas especies de aves, fundamentalmente gaviotas, límicolas y estérnidos, y también como lugar de cría y alevinaje de poblaciones suratlánticas europeas de peces, crustáceos y moluscos.
Entre las aves reproductoras en el área del parque natural mencionado destacan la Gaviota Patiamarilla, el Chorlitejo Patinegro, la Avoceta Común, la Cigüeñuela Común y el Charrancito Común. Entre las sedentarias se encuentran la Totovía, la Cigüeña Blanca y el Buitrón.